Amós García Rojas: “Mientras siga habiendo nuevos casos pueden aparecer nuevas variantes”
El epidemiólogo ha recalcado en 'Herrera en COPE' que "no existen evidencias científicas que avalen la inoculación de una tercera dosis"
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Los mayores de sesenta años ya están recibiendo en Israel una tercera dosis de la vacuna contra la covid-19 convirtiéndose así en el primer país del mundo que ha impuesto esta operación de refresco para seguir luchando contra la propagación del virus.
El servicio médico Maccabi ha anunciado que el objetivo es el de llegar con esta tercera inoculación a un millón y medio de personas mayores de 60 años en un plazo de diez días.
Así lo ha anunciado en ‘Herrera en COPE’ Daniel Blumenthal, corresponsal de COPE en Israel, que ha informado que la posibilidad de esta tercera dosis ha sido fruto de un debate que se ha mantenido “durante estas últimas semanas”.
En Israel, donde viven nueve millones de personas, el porcentaje de contagio de la variante delta es alarmante y aunque aún no está probado científicamente, las autoridades emitieron un mensaje en el que aseguraban que “los mayores de sesenta años que no recibieran la tercera dosis estarían más expuesto a contraer la enfermedad de manera grave”.
Por esto, el Gobierno israelí ha estimado que la tercera dosis “ayudará a reducir el número de contagiados”, y principalmente “el número de víctimas mortales de la pandemia”, como adelanta el corresponsal.
El equipo de ‘Herrera en COPE’ ha podido contactar con Carmen Rodríguez, una española residente en Israel que ya ha recibido esta tercera dosis de la vacuna contra la covid-19. “Me encuentro estupendamente bien, igual que tras el primer pinchazo. No he tenido ningún efecto secundario”, ha asegurado a COPE.
“Esta tercera inoculación se está tomando con más calma quizá porque hay menos presión por parte del Estado. Para la primera y segunda dosis nos convocaban en unas instalaciones preparadas especialmente con unos procedimientos absolutamente dinámicos, ágiles y atractivos. Ahora, como la gente ya conoce perfectamente la experiencia y sabemos que nos ha ido muy bien, no es necesario un plan de marketing para inocular la tercera dosis de la vacuna. Sencillamente con el hecho de anunciarla y facilitarte que vayas al ambulatorio que escojas es suficiente para poder cumplir con la tercera dosis”, ha concretado.
La española residente en Israel también ha destacado que “se está cumpliendo con el protocolo con una cierta normalidad. Sin dramatismo y sin pausa”.
“No existe todavía una sólida evidencia científica”
Con el objetivo de conocer cuales son las evidencias científicas que avalan la iniciativa de Israel, ‘Herrera en COPE’ también ha podido hablar con el epidemiólogo Amós García Rojas, presidente de la Asociación Española de Vacunología, quien no ha dudado en afirmar que “la tercera dosis de la vacuna se está empezando a plantear sin que todavía haya una sólida evidencia científica que la justifique”.
A pesar de esto, el epidemiólogo ha asegurado que “hay que empezar a debatir sobre este escenario porque hay dos circunstancias que pueden indicar la necesidad de una revacunación. La primera es que no conocemos exactamente la duración de la capacidad protectora de la vacuna, y la segunda es que al haber tanta gente en el mundo sin vacunar la aparición de nuevos casos y nuevas variantes es una realidad. Estas nuevas variantes podrían ser más resistentes a las vacunas que tenemos en estos momentos por lo que tendríamos que readaptarlas y, por lo tanto, volver a vacunar. El escenario es este”, ha remachado.
Del mismo modo, Amós García Rojas también ha aclarado que “comenzar a inocular la tercera dosis mientras hay países donde no han podido poner la primera va a contribuir a crear un escenario injusto y complicado desde el punto de vista de gestión de la pandemia”.
“Mientras siga habiendo nuevos casos pueden aparecer nuevas variantes y algunas de las cuales nos pueden dar un susto”, ha recalcado.
Respecto a la implantación de esta tercera dosis de la vacuna en España, Amós García Rojas ha expresado que “no tiene la menor duda” de la eficacia de una tercera dosis en “algunos perfiles concretos, como puede ser los inmunodeprimidos donde las dos primeras dosis no hayan producido esa calidad en la respuesta protectora. Avanzar con la tercera dosis en otros ámbitos tendrá que estar unida a las evidencias científicas que se vayan consolidando al respecto”.