Marc Vidal denuncia la gestión del gobierno de los Fondos Next Generation: "Ineficiencia"

La gestión de los Fondos Next Generation no va bien. Sobre este asunto habla Marc Vidal en su 'Salida de Emergencia'.

Explica que "en 2023, España alcanzó un récord negativo en la gestión de estos fondos. Solo se ha puesto en marcha el 27% de lo previsto, marcando el peor desempeño desde el inicio del Plan de Recuperación y Resiliencia. Este bajo rendimiento contrasta con lo que se nos dice desde las oficinas encargadas de este asunto, donde se afirma estar a pleno rendimiento en la ejecución de esos fondos, supuestamente beneficiando al tejido productivo del país".

El Gobierno, denuncia Marc Vidal, "llegó a decir que en una sesión de control en el Senado, que España era líder en la recepción y ejecución de estos fondos, con más de 35.000 millones asignados a más de 600.000 beneficiarios, incluidas 400.000 empresas y cerca de 6.000 municipios".

Pero eso no cuadra con los datos de la Intervención General de la Administración del Estado. Asegura el economista que dicen que "lo publicado es que, hasta el cierre de 2023, se realizaron pagos por solo 9.822 millones de euros, representando un 36% del total comprometido en tres años".

"España es el país de la UE con más presupuesto asignado para todo tipo de fondos"

Y sin entrar en otro tema, el de la calidad de lo utilizado, "la tendencia en lo que llevamos de año es a empeorar, según los propios datos de la Intervención General. Al no tener nuevos Presupuestos, nada parece indicar que esto pueda mejorar sustancialmente".

Cabe recordar que España "es el tercer país de la UE con más presupuesto asignado para todo tipo de fondos europeos y siempre es de los que menos los ejecuta. Nunca lo hemos logrado. Ni con los de cohesión, ni con los estructurales, ni con los de inversión".

La ineficiencia administrativa, la retorcida burocracia y la inexistente estrategia política, lo han impedido, en palabras de Marc Vidal.

"Ningún gobierno, fuera del color que fuera, ha sido capaz de transformar nada con el capital que se nos ha transferido desde Europa".

Por último, alega que "si aprovechamos esos fondos, en una década seremos un país más competitivo, más productivo, más tecnológico, más moderno y con una economía más diversificada. Un país del que nos podremos sentir orgullosos. La transformación de un país no se hace desde las oficinas acristaladas de una consultora, ni desde los despachos enmoquetados de un ministerio, hay que bajarlo a tierra y dejarse de tanta burocracia, barreras, reflexiones y tanta tontuna".