Una preparadora de oposiciones avisa de cuál es el error que suele ver en muchos aspirantes: "Se están complicando el objetivo"

Una de las mayores preocupaciones de los españoles últimamente, además de otras como la vivienda, la inmigración o la política, es la referente al empleo y la estabilidad laboral. Porque España no es un país que se caracterice por tener unas condiciones laborales especialmente buenas, ni unas tasas de desempleo especialmente bajas, una situación que se agrava aun más en el caso de los más jóvenes.

Y es que si lo que se busca es formar una familia, comprar una casa y tener unos ingresos mensuales más o menos estables, será imprescindible contar con un trabajo fijo, algo que es prácticamente imposible cuando la mayoría de los contratos son de campaña o de temporada, especialmente en el comercio o la hostelería.

Soluciones

Ante este problema, los jóvenes, que son los principales perjudicados en la tasa de desempleo, deciden optar, cada vez más por la alternativa de opositar. Los datos son sencillos, 4 de cada 10 jóvenes, y cada vez más, se deciden por querer trabajar en el sector público. Los jóvenes lo califican como la solución a la estabilidad laboral, algo que ha caracterizado popularmente a los funcionarios.

Begoña Caparrós Palop, directora de Preparadores para la Enseñanza, ha dicho en La Linterna que aunque sí que hay aumento en la cantidad de personas que muestra su intención de opositar, este no es muy significativo. “Las cifras suelen repetirse cada año en los cuerpos docentes y el aumento entre los jóvenes no es muy significativo”, afirmaba Caparrós.

La experta también ha querido decir que, aunque “el motivo fundamental en general, es la estabilidad laboral. En el caso de los más jóvenes en la especialidad de la docencia, predomina el deseo de ser profesor”, dice la directora.

Oferta de plazas

El principal drama de quienes quieren opositar para trabajar en el sector público, siempre es el desconocimiento del proceso. Cuando no se conoce cuando va a haber una convocatoria de plazas de lo que quiero preparar, entra la angustia. Una vez se conocen los datos como el número de plazas y las fechas de las pruebas, uno se puede organizar.

Para este 2025 ya se han publicado bastantes ofertas de plazas. En casos como los del sector educativo, Begoña afirma que las plazas en educación para este año, “son el resultado de las mesas de negociación entre los sindicatos mayoritarios y las consejerías de educación. De este modo sí se puede saber la tendencia de las oposiciones, luego es muy raro que haya sorpresa”.

“Si tienen una información oficial, si cuentan con ella, el tiempo de espera no es tan angustioso. ¿Por qué? Porque hay un cronograma de publicaciones, porque a priori, por lo menos desde preparadores de oposiciones, están muy en contacto con nosotros a través de las sesiones informativas que impartimos y lo único que manejamos es la información verídica, que es la oficial”, confirmaba la directora de Preparadores.

Objetivos

Aunque la dificultad de la prueba irá en función de cual es el puesto al que se quiere optar, ya que no es lo mismo ser médico, conserje, profesor o policía, son algunos los que llevan años angustiados porque no consiguen sacar una oposición. Pero la experta aclara: “Aquel que se prepara la oposición, el perfil de hace diez años, según los recursos personales que tiene cada uno, al ser una oposición de nivel A1, es equivalente al mismo nivel que, por ejemplo, una persona que decidió otra oposición, como puede ser inspector de trabajo, tienen más posibilidades en los cuerpos docentes que en otras oposiciones para ser funcionario público, porque es un servicio esencial”, afirma.

Aun así, algo muy común cuando se pasa un proceso de oposición, es no sacar plaza directamente, sino que se saca la interinidad. En este caso, “una vez que saca la interinidad, trabaja como interino, continúa con la preparación, es un objetivo que es muy realista plantearse de que vas a sacar plaza”, dice Begoña, que en cambio, también afirma que “el que se aloja y se queda situado en la interinidad, está complicándose el objetivo de plaza y a veces la zona de confort puede más que el hecho de decir, bueno ya, finiquito, voy a por la plaza”.