Antonio Herraiz: "La salida de Iglesias de Moncloa será en diferido y sin explicar la razón de su movimiento"

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Se llamaba Pilar González Bres, tenía 43 años y era madre de dos niñas pequeñas. Pilar era profesora de matemáticas en el instituto Guadalpín de Marbella, en Málaga. Hace justo 15 días, el miércoles 3 de marzo, le pusieron la primera dosis de AstraZeneca. Por aquel entonces, en toda España tomaba ritmo el plan masivo de una vacuna que se ponía a profesores, a policías, a bomberos y a fisioterapeutas menores de 55 años.

Hace 15 días apenas se hablaba de los efectos secundarios, pero a las pocas horas de recibir la vacuna, Pilar comenzó a sentirse mal. Fue a urgencias al hospital con fuertes dolores de cabeza y los médicos lo enmarcaron en la reacción prevista de la vacuna. A Pilar, el dolor no se le quitaba y volvió al hospital donde le hicieron un TAC, que no desveló nada relevante. Este domingo el dolor era ya insoportable y al volver a urgencias le detectaron una hemorragia masiva en el cerebro. Durante la intervención le descubrieron también un edema cerebral. Fue intervenida, quedó en coma inducido y fallecía este martes.

En principio, Pilar no tenía patologías previas y ahora mismo, se está investigando si esta muerte tiene relación directa con la vacuna de AstraZeneca. Y antes de escuchar a los que saben es bueno poner todo en contexto. En España hay 940.000 personas que han recibido esta vacuna. Además del caso de Pilar, con resultado fatal, Sanidad está estudiando, al menos, otros dos más con trombos. Valencia ha informado de otros tres casos: dos policías y un guardia civil.

En Reino Unido se han puesto más de 11 millones y siguen con el proceso; y en el conjunto de Europa, cerca de 18 millones con una docena de casos en estudio que han provocado la paralización del plan de AstraZeneca, no sólo en España, también en Francia, en Alemania, Portugal o Italia.

¿Hay motivos para preocuparse? Bueno, mañana la agencia europea del medicamento publica los detalles de un estudio, pero el primer avance determina que no hay relación entre la vacuna y estos casos de trombos. En esta línea ha seguido en COPE, José Luis Barranco, portavoz de la Sociedad Española de Medicina Preventiva: “Aparentemente, con los indicios que hay hasta ahora, con un documento que ha emitido la Agencia Europea del Medicamento, parce que no existe relación. Pero lo suyo, como bien están haciendo, es estudiarlo para poder emitir un veredicto lo más cercano y seguro posible”.

El revuelo entre los profesores, bomberos, policías que se han puesto esta vacuna es importante. Pero hay que confiar en los expertos, en los organismos de control, sin olvidar que los casos que han aparecido, si se ponen en relación con la cifra de vacunas que se han puesto, es insignificante.

Preocupa el plan de vacunación y los imprevistos que surgen sobre la marcha, mientras en el Gobierno siguen ocupados en el baile de sillas tras la anunciada salida de Pablo Iglesias del Gobierno. Será una salida en diferido, aprovechando el altavoz de Moncloa y sin explicar los motivos reales de su cambio repentino. Eso ha provocado que esta mañana la sesión de control al Gobierno haya sido una enganchada constante entre PP y PSOE por el terremoto político que comenzó en Murcia hace justo una semana.

Enseguida estamos en Murcia donde los 3 diputados de Vox todavía no han concretado cuál será el sentido de su voto. Visto el panorama, sólo ellos pueden hacer que salga adelante la moción de censura PSOE-Ciudadanos y no parece que estén por la labor.

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