Bustamante se sincera sobre las dificultades tras más de 20 años de carrera: "Cuando se apagan la luces"

Los últimos años de David Bustamante han sido un no parar. Lo hemos visto participando en un montón de proyectos muy diversos: desde programas de televisión, (que no le faltan) hasta musicales, como ha sido el caso de Ghost. En él, interpretaba a uno de los personajes más célebres del cine: Sam Wheat, a quien, en la película de los 90, daba vida Patrick Swayze.

Cuando escucha una de sus interpretaciones en 'La Tarde', se emociona casi hasta las lágrimas, porque reconoce "no haberme escuchado nunca esto" y haber sido "lo más hermoso de su vida". Lo que iban a ser unos meses al principio, se convirtieron en dos años de muchísima intensidad.

Reconoce que no le gusta escucharse, ni verse en la televisión, ni casi escuchar su música, que enseña siempre a sus allegados. Cuesta creer que, con esa timidez, sea alguien que lleva triunfando en los escenarios más de 20 años, desde que comenzase Operación Triunfo. Y ahí sigue su carrera, por todo lo alto, con su nuevo sencillo El Día que te Vayas.

Una canción que reconoce ser "una tiradera para los que se han liberado de una pareja tóxica y miden el desamor desde la parte positiva" y que le gustó hasta su hija, que ya tiene 16 años. Cuenta divertido que a Daniella le ha encantado la canción, aunque ella no es "muy de baladas".

¿Cómo seguir en la cúspide después de 20 años?

A él lo recordarás por su sensibilidad, su talento, y su juventud, cuando, con apenas 19 años, entraba a la academia de Operación Triunfo. Para ser justos, casi nadie de los 16 concursantes sabía a lo que entraba, pero él conquistó a todo el público.

Desde entonces, no se ha bajado de los escenarios, independientemente de si se trata de grandes estadios, salas o teatros. David Bustamante ama lo que hace y lo sigue demostrando. Sin embargo, a pesar de tener tantísimos fans y haber girado por todo el mundo, él sigue siendo el mismo chico de San Vicente de la Barquera que conquistó a todos los espectadores.

Pero, ¿cuál es su secreto? Él mismo lo cuenta: no olvidarse de dónde viene. "Sería un error olvidarme, y me encanta volver a mis raíces" decía.

Dice que sigue hablando con los amigos que hizo con cinco años, que les llama todos los días y sabe "todo sobre su vida, es mi pilar más fuerte junto con mi familia y el amor".

Cuenta, además, que ha sabido diferenciar a aquellos amigos verdaderos de "los palmeros", porque los que han estado siempre, siguen estándolo "cuando se apagan las luces".