Carmen Avendaño, madre coraje: "Los narcos son unos desgraciados, lo único que les importa es el dinero"

La bala chocó directamente contra su corazón. Por un momento, llegó a pensar que había llegado el final. Se tocó. Por suerte, el chaleco antibalas le había salvado la vida. Por suerte, el canalla que le había disparado había sido inmovilizado, aunque hubo que dispararle varias veces en las piernas para conseguirlo.

El registro en aquella nave industrial había sido más complicado de lo que esperaban. A aquel edificio situado entre Collado Mediano y Alpedrete, en la Comunidad de Madrid, había acudido junto a sus compañeros de los GEO para proteger al grupo de la Unidad Central de Drogas y Crimen Organizado que se estaba encargando de la operación. 

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Allí se encontraron con un grupo de lugartenientes al servicio de uno de los mayores capos gallegos de la droga: Sito Miñanco, uno de los pioneros de la importación de cocaína en los años 80, y que aún sigue cumpliendo condena en régimen de semilibertad en la cárcel de Algeciras. Precisamente, allí en la localidad gaditana era detenido Miñanco como parte de esta operación en la que también ha sido arrestada una de sus hijas, además de un hijastro de otro de los grandes narcos gallegos, Laureano Oubiña.

"Estos desgraciados, que lo único que les importa el dinero, contribuyen a que los jóvenes tengan muchos problemas.”

En 'La Tarde' hemos hablado con Carmen Avendaño. Carmen vio a dos de sus hijos engancharse a la droga y a través de su Fundación Érguete fue el gran azote del propio Oubiña. Ahora, se muestra indignada de que personas con el historial de Sito Miñanco tengan la oportunidad de volver a delinquir: “Soy una clara defensora de que los presos se integren socialmente, pero siempre tengo dudas. La verdad es que me ha sentado como un tiro lo que ha pasado.”

Carmen lamenta que sigan aprovechándose de la ignorancia de muchos jóvenes:  “Consumir drogas de adulto es un gran error pero es una responsabilidad propia. Pero es peor los chicos de 14, 15 años que se inician en el consumo de hachís. Sigue habiendo mucho consumo. Estos desgraciados, que lo único que les importa el dinero, contribuyen a que los jóvenes tengan una vida con muchos problemas.”