¿Cómo se explica que la tasa de inflación descienda si los precios siguen subiendo?
Un catedrático de Economía Aplicada y un profesor de Economía analizan en COPE el IPC de junio y vaticinan cómo será el resto del año
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Este miércoles se ha conocido el dato del IPC de junio. "Es una buena cifra", calificaba Fernando de Haro, aunque apuntaba que, una cosa son los datos de macroeconomía y otra bien distinta, cómo repercute en la cesta de la compra. En el pasado mes, la tasa de inflación ha sido del 1,9, la más baja desde marzo de 2021. Sin embargo, la subyacente, la que afecta al precio de los productos, "sigue bastante alta", en torno al 6 por ciento.
Los precios de los alimentos básicos se disparan un 10,3 por ciento, suponiendo una presión para las familias, que se ven obligados a cambiar sus hábitos. Para interpretar todos estos datos y cómo se ve afectada la ciudadanía, en 'La Tarde', Fernando de Haro ha contado con el catedrático de Economía Aplicada de la Universidad CEU San Pablo, Rafael Pampillón y el profesor de Economía de IESE Business School, Javier Díaz-Giménez.
Las exportaciones y el efecto escalón
Pamplillón comentaba que la razón es que el consumo está bastante flojo. Sin embargo, la economía española está creciendo a través de las exportaciones, lo que muestra su "competitividad, porque tenemos unos costes menores que nuestros competidores". Poniendo en contexto los datos, la inflación de la zona euro es mayor que el de nuestro país, del 5,5 por ciento. "Luego está el efecto escalón, que al quitar junio del año pasado, que fue muy inflacionista respecto a mayo, lo que explica la diferencia".
Pérdida de poder adquisitivo
Por otro lado, Díaz-Giménez apuntaba que parte de la explicación son los bajos salarios. Las familias pierden poder adquisitivo debido a que los precios suben más rápido que los sueldos. "Esa es la manera de hacernos más competitivos dentro de una unidad monetaria, no hay otra forma", se resignaba. Llamaba a la tranquilidad contextualizando el peso de los alimentos en el IPC, que es del 18 por ciento. "Si han subido un 10, la cesta de la compra ha subido un 1,8".
Pese a esto, expresaba que "a nadie hay que explicarle cuánto cuesta la cesta de la compra ni cuándo se queda sin dinero". Ante esta situación, podemos continuar con nuestros hábitos debido a la "caída espectacular de los productos energéticos", cuyos precios han descendido un 25 por ciento.
Las previsiones para el resto del año
El profesor aseguraba que "el efecto escalón va a desaparecer seguro el mes que viene". El 2023 se cerrará con la inflación entre el 4,5 o el 5. "Yo ahora mismo pienso que todo el año que viene vamos a ir viendo una inflación negativa. Pero no podemos contar con una caída en el corto plazo ni con los tipos de interés tampoco".
Tal y como ha desgranado el catedrático, el dato del IPC de Estados Unidos ha recuperado los niveles del último año antes del covid. "Probablemente, la próxima reunión del BCE suba los tipos, del 4 que estamos ahora al 4,25. Pero a lo mejor la Fed, que se reúne al final de este mes, no lo suba porque tiene un dato de inflación bastante razonable".
A esto, Díaz-Giménez aportaba que, "si sube o no sube un cuarto de punto, no va a cambiar mucho el escenario". Con la constante situación cambiante en la que vivimos, le parece "prudente" vaticinar que "los tipos se van a mantener sobre el 4 por ciento, el euríbor también" y piensa que se mantendrá así "durante la mayor parte del año que viene".