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"Es una pena que ahora David, el de la batuta inquieta, haya tenido que renunciar a este puesto que le iba como anillo al dedo"
Escucha el monólogo de Jorge Bustos del jueves 6 de febrero
- 3 MIN
Hoy nos hemos propuesto en COPE analizar el principal problema de los españoles, o uno de ellos según todas las encuestas, que es el acceso a la vivienda. Queremos averiguar por qué la gente, y en especial los jóvenes, tiene cada vez más difícil acceder al alquiler, y no digamos ya a la compra de una vivienda en nuestro país. Y por qué está fracasando con estrépito la ley que aprobó este Gobierno se supone que para abaratar los precios, cuando está consiguiendo exactamente lo contrario. Pero eso será dentro de un momento.
Ahora quería centrarme en un hombre que también tiene problemas de vivienda. Y de trabajo. Un hombre llamado David Sánchez Pérez-Castejón. Un hombre que no sabemos dónde vive, si en Portugal o en Badajoz, no está claro. Y tampoco sabemos dónde trabaja exactamente, porque ni siquiera él mismo es capaz de ubicar la fantasmal Oficina de Artes Escénicas que le montaron a dedo para que pudiera cobrar un sueldo público sin tener que pisar el curro. Sin saberse siquiera el nombre de sus colaboradores y subordinados.
Los melómanos de todos los pueblos de Extremadura se sienten huérfanos sin David Sánchez Pérez-Castejón"
Copresentador de 'Mediodía COPE'
Al parecer este hombre tiene un hermano famoso, poderoso, que al principio supuso una clara ventaja para él. Y en concreto para su carrera artística, porque nuestro David es todo un artista. Es director de orquesta. Estaba destinado a convertirse en el Barenboim de Extremadura. Pero ha tenido un par de problemillas por el camino. El primer problema es que ese puesto de director de la Oficina de Artes Escénicas se lo crearon a dedo por ser el hermano de quien era. Y el segundo problema es que David ha heredado la misma soberbia que Pedro. Porque cuando le pillaron y lo sentaron ante una magistrada dispuesta a hacer su trabajo con independencia y rigor, se despatarró en la silla y reconoció abiertamente que ni sabía dónde estaba su oficina ni a qué se dedicaba ni con quién. Aseguró además que el curro lo había encontrado en Google, suponemos que en la pestaña aquella de “voy a tener a suerte”, y vaya si la tuvo. El curro perfecto: solo concurre él y no tiene ni que fichar.
Es una pena que ahora David, el de la batuta inquieta, haya tenido que renunciar a este puesto que le iba como anillo al dedo, porque ninguna empresa se ha prestado a producir su ambicioso programa de ópera. En esto le ha ocurrido como a su cuñada, la conocida directora de cátedra Begoña Gómez, que dirigía máster sin tener ni licenciatura ni alumnos: solo patrocinios de empresas reguladas por su marido. Pero el caso es que ahora los melómanos de todos los pueblos de Extremadura se sienten tan huérfanos de lo suyo como los alumnos madrileños de aquel máster de captación de fondos de Bego “fundraiser”.
Pero que nadie se equivoque, tampoco David. El hecho de haberse visto obligado a dimitir de su puesto creado a dedo por un presidente de diputación socialista, también imputado, no significa que decaiga el proceso. El proceso judicial sigue, y más vivo que nunca. Probablemente, el hermanísimo está a punto de sentarse en el banquillo por beneficiarse de un obsceno trato de favor que él ni siquiera tuvo la prudencia de negar convincentemente ante un tribunal. Suponemos que está convencido de que su hermano o su tío Cándido Conde-Pumpido lo terminarán amnistiando si resulta condenado. Es lo que pasa cuando eres pariente o socio del presi en esta nueva república bananera del sur de Europa".