'El cura hostelero' que formó a chicos de la calle y para el que la jubilación no era una opción: "No te puedes estancar"
Este fin de semana fallecía el precursor del Grupo Lezama, el empresario, periodista y sacerdote que creyó firmemente en la capacidad de superación del ser humano
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Luis de Lezama es el protagonista de nuestra historia de hoy. Este fin de semana fallecía en la Clínica Universidad de Navarra, 'el cocinero español de los Papas', un cura que vio en los fogones la posibilidad de rescatar a unos cuantos chavales de calle y que, después de muchos años de trabajo, fue capaz de levantar un verdadero imperio hostelero.Tras ordenarse sacerdote, Luis fue destinado como párroco a la localidad de Chinchón, al sureste de Madrid y allí comenzó a tener cada vez más contacto con los que se convertirían en los destinatarios de todo su proyecto de vida, los jóvenes.
Te puedes jubilar de trabajar, pero de ser persona y de progresar, no"
En Chinchón fue apodado como 'El cura de los maletillas' por promocionar a esos chicos que llegaban sin medios ni ayuda de ningún tipo para abrirse camino en el mundo del toreo... La premisa de 'Dadnos trabajo' fue la más importante en toda la carrera de Don Luis. Fue en 1965 cuando lo destinaron a Entrevías Viejo, cerca del Pozo del Tío Raimundo, un barrio marginal en el que el joven sacerdote conoció el infierno de las drogas y fue ahí cuando comenzó la aventura de abrir un pequeño bar en uno de los enclaves más famosos de la ciudad de Madrid.
Chicos sin recursos y de la calle se formaron en aquellas cocinas y la Taberna se convirtió en un lugar de encuentro de intelectuales, poetas y toreros. El inicio de un proyecto que hoy día cuenta con 10 establecimientos, más de 500 empleados y tres escuelas de hostelería de grado superior que han formado a cientos de profesionales en los servicios de restauración. La educación que recibieron cada uno de estos chavales fue también, uno de los objetivos fundamentales en el propósito de Don Luis alguien que creía firmemente en la capacidad de superación que existe en cada uno de nosotros.
el cura que preparó el catering para SAn juan pablo ii y benedicto xvi en españa
Luis de Lezama consideraba que los restaurantes y los bares eran también, además de lugares de tertulia, lugares idóneos para las confesiones y que era realmente en esas barras donde el Evangelio se encarnaba a través de cada uno de los trabajadores y, por supuesto, de cada uno de los clientes, unos lugares en los que la jubilación no tenía cabida..."No puede uno estancarse. No te puedes jubilar de ser persona. Te puedes jubilar de trabajar en lo que sea, pero de ser persona y de progresar, no te puedes jubilar. Es la vida hasta que Dios te la quita. Somos administradores de la vida, algunas veces de la tuya y de los demás", afirmaba el promotor de Grupos Lezama en una de las múltiples entrevistas que concedió a lo largo de su carrera.
comandas, periodismo, afición taurina y fe
Dirigió las cocinas durante los viajes pastorales a España de Juan Pablo II y de Benedicto XVI durante la JMJ de Madrid en 2011. Sus restaurantes han recibido a personalidades como Barack Obama o Bill Clinton en Washington e incluso, ofició la boda de Julio Iglesias y su mujer Miranda, en la intimidad.
Una vida de repleta de comandas, de trabajo, de afición taurina y también, de periodismo, pero siempre con un objetivo marcado: la formación de verdad, en todos los aspectos, a través de la innovación pedagógica; un proyecto que sigue dando resultado a día de hoy en el barrio de Montecarmelo, en la parroquia del colegio Santa María la Blanca el lugar en el que Don Luis ha desarrollado hasta su jubilación su labor pastoral.