"Los migrantes son como superman": La experiencia de tres jóvenes en el CETI de Melilla

Un grupo de 20 jóvenes de una parroquia de Tres Cantos en Madrid, Santa María Madre de Dios, decidieron viajar en agosto a Melilla para convivir con un grupo de migrantes

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Carlos de Arteaga

Publicado el - Actualizado

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Tres de los veinte voluntarios que estuvieron en el CETI de Melilla han compartido su experiencia este domingo en el plató de 'Ecclesia' de TRECE, para contar de primera mano cómo es el trabajo con el colectivo migrante. Silvia, una de las voluntarias de este grupo, asegura que “se nos presentó la oportunidad, y no podíamos decir que no”, y aunque suponía renunciar parte de las vacaciones de verano, según Javier, otro de los parroquianos de Tres Cantos, “puedes hacer todo, aunque a veces cueste coordinarse”. Además, el viaje, planeado por el párroco, recorre el itinerario inverso al que sufren los migrantes cuando saltan la valla de Melilla, un golpe de realidad que, según Sofía, otra de las voluntarias del CETI procedente de Madrid, “sirvió para ser conscientes de que la comunidad en la que vivimos no se queda simplemente en nosotros, sino que debe conocer otras realidades sociales”.

Los migrantes atendidos por estos voluntarios, contaban después de la experiencia que estos jóvenes han hecho que se sientan personas, dejando de simplemente sobrevivir para empezar a vivir. Sofía explica que “entramos a su realidad al mismo nivel que ellos, y por eso sintieron una gran acogida”, aunque es una vivencia que también ha aportado mucho a estos jóvenes católicos. “Son como superman. Nos han contado anécdotas muy duras de su llegada a España, la dificultad de conseguir papeles o la integración en la sociedad” contaba Silvia sobre las conversaciones que mantenía con algunos de los migrantes del centro.

A pesar de esa dura situación, a Sofía le ha llamado la atención “la gran ilusión y la fuerza que tienen para conseguir su sueño y cómo transmiten que, por muchos impedimentos que tengan, quieren luchar para encontrase como en casa”. Además, Javier asegura que “aunque nos separan algunas diferencias culturales, en el CETI sentimos hospitalidad y una acogida tremenda. El primer día no nos conocían y aun así nos saludaban todos por la calle”.

Xabier Gómez, director del departamento de Migraciones de la Conferencia Episcopal Española, entró en el programa para animar a los jóvenes a que sigan el ejemplo de este grupo de Tres Cantos, ya que espera que “esto sea solo el principio de una nueva forma de situarse ante la realidad de la migración”, porque, en palabras del Xabier, es importante que los jóvenes “traten que demostrar que aquí, en España, ya construimos un futuro con los migrantes”.

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