"El Gobierno de España está en una posición ambigua que se convierte en colaboracionista de un régimen criminal como el de Maduro"

“Para que se rompan de inmediato todas las relaciones diplomáticas, todas las relaciones comerciales, todas las relaciones consulares, que se vayan de aquí todos los representantes de la delegación del Gobierno del Reino de España y todos los consulados y todos los consulares. Y nos traemos a los nuestros de allá, que se queden ellos con sus asesinos, con sus golpistas, con sus fascistas, con sus violentos”. Este energúmeno forma parte del staff directivo de ese régimen sanguinario del sátrapa Maduro. Es Jorge Rodríguez, hermano, por cierto, de la vicepresidenta chavista, Delcy Rodríguez. Se la conoce por sus andanzas dentro y fuera de Venezuela. Y perseguida y señalada también por estar muy implicada en ese régimen narcoterrorista que es Venezuela. Y este sujeto, que es el presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, se ha puesto como un basilisco porque el Parlamento de España, el Congreso, ha decidido hacer lo que en justicia corresponde, que es declarar presidente de Venezuela, o reconocer como presidente electo de Venezuela, a Edmundo González, que desgraciadamente tuvo que exiliarse en España, y aquí lleva el pasado domingo.

Hoy, por cierto, ha sido recibido por Sánchez. Sánchez no le reconoce todavía como tal. Dice que todo esto lo hace por motivos humanitarios. Pero el Gobierno de España todavía no da ese paso. A pesar de que el Parlamento ya lo ha declarado como tal. Y que el Senado hará lo propio. El Senado también. Ya se ha presentado una moción para que el señor Edmundo González sea también declarado por la otra Cámara, la Cámara Alta, presidente electo de Venezuela. Y lo va a hacer también el Parlamento Europeo.

Y el gobierno de España se resiste. No sabemos si porque está detrás, como siempre, esa mano oscura, terrible, del expresidente Zapatero, que defiende a este régimen sátrapa, sanguinario de Venezuela, o porque está enredando con alguna cosa por ahí para seguir, de alguna forma, manteniendo a Maduro en el poder. Porque ya no sabemos realmente por qué el señor Sánchez, que recibe a Edmundo González hoy en la Moncloa. Hombre, lo lógico es que reconozca que hubo un golpe de Estado allí en aquel país, que Maduro frustró las esperanzas y el voto de todos aquellos que consideraron que ya no debería seguir en Miraflores, en el Palacio Presidencial, y que además ha desatado una represión de encarcelamiento y de muerte contra todos aquellos que le están reclamando que salga del poder porque ya no está apoyado por las urnas, y el Gobierno de España está ahí, en esa posición ambigua, que de alguna forma se convierte en colaboracionista de un régimen criminal como el de Maduro, en tanto no dé el paso, para liderar en la Unión Europea lo que estamos esperando los demócratas y todos los españoles, y por supuesto esos 8 millones de venezolanos que están en el exilio, que tuvieron que abandonar ese país.

Tiene gracia que esté en el energúmeno de Rodríguez, diga “que se vayan todos los de aquí, y vamos a traernos los de allá”. Los de allá ya no van a volver. Rodríguez, ¿cómo van a volver? Si precisamente huyeron de la pobreza y de la represión, para no volver a Venezuela, en tanto siga usted, su hermana y el sátrapa Maduro al frente del poder.