Los inversores se limitan a nadar y guardar la ropa a la espera de noticias de la Reserva Federal
Todos los ojos miran hacia la Reserva Federal de Estados Unidos, que este miércoles anunciará sus decisiones sobre el precio del dinero
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Todos los ojos miran hacia la Reserva Federal de Estados Unidos, que este miércoles anunciará sus decisiones sobre el precio del dinero. Los analistas creen que la Reserva tratará de poner la venda antes de la herida con una rebaja de un cuartillo de punto en el precio del dinero. Es una medida que parece destinada más a satisfacer las peticiones del presidente Trump y a animar a los mercados que a reactivar una economía que todavía se mantiene sólida.
Sería una rebaja de tipos “preventiva”, lo que tampoco está mal. De hecho, es algo que gusta especialmente a unos inversores que temen como a un nublado la posibilidad de que el enfriamiento de la economía, -si no se toman cartas en el asunto-, se convierta en una recesión.
En este compás de espera, cada indicador macroeconómico es analizado con lupa en los mercados. Dentro de casa, hoy se ha publicado el dato de inflación adelantado correspondiente al mes de julio. La tasa interanual se sitúa en el 0,5 por ciento, una décima por encima de la lectura del mes anterior. Mañana, martes, se publicarán los datos de confianza del inversor tanto en la zona euro como en Estados Unidos.
En ambos casos se espera una ligera mejoría. El miércoles los mercados dispondrán de algunas referencias importantes. Entre ellas las cifras de paro y de inflación en la zona euro. También los datos de desempleo en Alemania y el PIB de España. Los expertos creen que la velocidad de crucero de la economía española se ha reducido ligeramente del 2,4 al 2,3 por ciento.
También cuecen habas en Japón, cuyo gobierno ha rebajado sus previsiones de crecimiento para este año. Espera ahora un aumento del PIB del 0,9 por ciento, frente al 1,3 anterior. Para el ejercicio próximo espera un crecimiento del 1,2 por ciento.
Con estas referencias, el índice Ibex 35 ha bajado un 0,11 por ciento, hasta 9.215 puntos. Bankia se ha dejado hoy un 2 por ciento. Se acerca peligrosamente a sus mínimos históricos. La entidad ha obtenido un beneficio de 400 millones de euros en la primera mitad del año, lo que supone un descenso del 22 por ciento.
Los inversores han puesto mala cara después de que la entidad haya confirmado que no alcanzará en 2020 los 1.300 millones de euros de beneficios que se contemplan su plan estratégico. Pero Bankia ha dado también motivos de alegría, porque cumplirá el resto de objetivos y porque han mejorado tanto la calidad crediticia de la entidad como los ratios de capital. Por su parte, Unicaja ha aumentado su beneficio un 11,4 por ciento, hasta 116 millones.
El Ayuntamiento de Madrid ha aprobado la llamada “operación Chamartín” lo que no ha animado demasiado a las constructoras e inmobiliarias. Las acciones del grupo San José, que participará de manera estelar en este importante proyecto urbanísitico, han cerrado con una ganancia próxima al 2 por ciento. Han subido ya un 90 por ciento en lo que va de año. Han cerrado hoy a 8,59 euros. Muy lejos quedan los menos de cuatro euros que costaban sus acciones hace tan solo un año.
Se ha desplomado hoy en Bolsa Laboratorios Almirall, a pesar de que ha aumentado un 16 por ciento su beneficio, hasta 62 millones de euros. Recortes también en Unicaja, que ha mejorado su resultado un 11,4 por ciento a cierre de junio, hasta 116 millones de euros. Mañana rendirá cuentas Enagás y también Siemens Gamesa, para la que se espera un beneficio de 95 millones de euros. El miércoles publican resultados BBVA y Red Eléctrica.
El jueves llegarán los datos de actividad industrial en China, Estados Unidos y Europa, junto con la subasta de deuda del Tesoro español, que colocará bonos y obligaciones con vencimiento a 5, 10, 15 y 30 años. La tesorería pública está financiándose actualmente con los costes más bajos que se recuerdan.
Además, se ha reducido el plazo medio de amortización a menos de siete años y medio. El Tesoro ha aprovechado esta favorable situación en los mercados de deuda para reducir en 5.000 millones euros la emisión neta prevista para este año, hasta 30.000 millones. También se ha reducido la emisión bruta de deuda, que apenas supera ahora los 200.000 millones de euros.
La prima de riesgo se mantiene en 75 puntos básicos, con la rentabilidad del bono a diez años en el 0,35 por ciento. El rendimiento del “bund” alemán marca nuevos mínimos históricos en el menos 0,40 por ciento. Es lo que cobra el Tesoro germano a los inversores que colocan su dinero a ese plazo. Desde hace meses el rendimiento de los bonos alemanes a diez años está por debajo de cero. Y ahora también los títulos a 20 años ofrecen rentabilidad negativa.
En el mercado de divisas, la libra esterlina sigue de capa caída. Hoy se cambia por debajo de 1,23 dólares, que es su cotización más deprimida de los dos últimos años. Pesa como una losa la creciente probabilidad de que finalmente se produzca un Brexit sin acuerdo con la Unión Europea. El euro cotiza estable en 1,1130 dólares.
La debilidad de la divisa británica favorece a las empresas exportadoras del Reino Unido, lo que justifica la subida de la Bolsa de Londres.