Un concursante de MasterChef pierde los nervios por lo que le dice Pepe Rodríguez: "Me has faltado al respeto"
Pepe Rodríguez y David protagonizaron un tenso momento por su discusión en pleno cocinado de la prueba de exteriores
Madrid - Publicado el - Actualizado
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La noche del lunes, 'MasterChef' volvió a formar parte de la parrilla de TVE. Esta vez, la tensión ha sido la gran protagonista de la noche, teniendo en cuenta que ya se encuentran a las puertas de la final. La presión que sientes los participantes por la semifinal hizo estallar a David, quien tuvo un difícil enfrentamiento con Pepe Rodríguez. Fueron los comentarios del chef sobre el fallido cocinado de Patricia lo que hizo estallar a su compañero, quien no dudó en reprochar a Pepe sus palabras.
"Hay que pensar en el comensal y, con lo que tenemos, vamos a hacer el mejor postre que podamos", decía Rodríguez ya en la recta final del cocinado después de valorar negativamente la preparación del postre. "Dale caña, David. Qué postre, ¿eh? Estarás orgulloso, ¿verdad?", soltaba el cocinero, mientras los aspirantes acababan de preparar la elaboración.
"Orgullosísimo. A más no poder ¿No me ves rebosante de felicidad?", decía el concursante muy irónico para, acto seguido, pedirle al juez que le dejase "tranquilo". "Pepe, me estoy poniendo de los nervios", le advertía David. "Pepe, me cago en diez ya", insistía, mientras el cocinero seguía señalando cada uno de los fallos que habían cometido.
A pesar de ello, Rodríguez continuó con las correcciones y señaló que necesitaban "clases urgente, para los dos, de matemáticas". "No sabéis multiplicar. Creo que no sabéis ni leer, que es lo más preocupante", seguía el chef. "Yo he venido a currar y tengo que sacar todos los platos. No sé a qué habéis venido vosotros", seguía diciendo el juez a la hora de emplatar.
"A nada. Déjame tranquilo, de verdad te lo digo. Ya se me está cruzando el cable", le seguía advirtiendo David ante los constantes comentarios de Pepe. A pesar de ello, el cocinero siguió con sus duros comentarios y el participante terminó estallando al escuchar el tono irónico de Pepe pidiendo que limpiasen porque habían dejado todo hecho un "caos". "Ya está, ¿no, Pepe? Ya está. Estoy cabreado, ¿Qué pasa? ¿No puedo estarlo? Si me faltan al respeto, también", estallaba el concursante. "Me has faltado tú al respeto diciendo que no sé leer, que no sé escribir ni calcular", le explicaba el participante.
"Sabes perfectamente por qué me he enfadado contigo"
"Perdona, una falta de respeto es hacer un helado mal pesado, hacer cinco bizcochos mal pesados", le replicaba Rodríguez. "Déjame tranquilo, de verdad te lo digo. Ya está, ¿no?", le pedía David. Acto seguido, el concursante abandonó las cocinas, pero la discusión no quedó ahí, dado que el chef le lanzó una pulla cuando Patricia asumió la culpa por el mal resultado del postre: "No tengáis reparos, que la culpa de que no haya salido el postre es mía. ¿O no, David?".
"Por supuesto que no es tuya", reaccionó el aludido. "Sabes perfectamente por qué me he enfadado contigo. Sabes dónde tienes que pinchar para sacarme el demonio, que me he prometido a mí mismo que no lo iba a sacar y, enhorabuena, lo has conseguido", se justificaba David. "No me meto en la cocina para sacar el demonio de nadie. Lo único que he hecho ha sido describir un hecho absolutamente objetivo", aseguraba Pepe muy rotundo tras recalcar que habían hecho "mal todos los cálculos de los ingredientes".
"Has pagado conmigo la frustración que yo creo que has acumulado durante toda la prueba, que la entiendo, porque trabajar con Patricia hoy ha sido muy difícil", opinaba Rodríguez. "Algo le tienes que dar a David porque te adora. En vez de pagarla con Patricia, que es quien no ha multiplicado bien, la quieres pagar conmigo", decía el chef a la concursante. "Has estado currando como un animal. Qué pena que no hayan lucido los platos al nivel de cómo has currado. No estaba Patricia a tu nivel ni de broma. ¿Qué más quieres que te diga?", reconocía Pepe. Como consecuencia, finalmente, ambos firmaron la paz con un abrazo. "¿Qué crees, que me iba a quedar con lo malo? Me quedo con lo bueno", aseguraba el juez.