VIRUS RESPIRATORIO SINCITIAL
El Virus Respiratorio Sincitial (VRS), el gran enemigo de los mayores para el que ahora hay vacuna: Puede ser mortal
Las comunidades autónomas del PP comenzarán a administrar el suero a partir del mes de septiembre
Valladolid - Publicado el - Actualizado
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El Virus Respiratorio Sincitial, (VRS) está detrás del mayor número de ingresos por bronquiolitis o neumonía en niños. Este segmento poblacional es además el principal transmisor. En la actualidad, la inmunización frente a este virus está recomendada por el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud a los menores de seis meses, pero hay comunidades autónomas que han decidido dar el salto y vacunar también al segundo segmento de población más vulnerable tras los niños, los mayores en residencias así como los pacientes inmunodeprimidos, trasplantados y pacientes oncológicos.
Los expertos en microbiologia, como el Doctor Raúl Ortiz de Lejarazu, aplauden la medida que, de momento, sólo llegará a las comunidades gobernadas por el PP. “Es un virus que puede producir un cuadro incluso más grave que la gripe y para el que, por el momento, no tenemos ningún tratamiento disponible”.
La vacunación se iniciará en el mes de septiembre, pero antes, las comunidades que actualizarán su calendario vacunal, deberán realizar la compra de una vacuna que, el experto en microbiología, considera vital. “El VRS amenaza especialmente a las personas mayores, por encima de 75 - 80 que son las que tienen más fragilidad añadida”, ha explicado.
Un acto de justicia social
El Doctor Ortiz de Lejarazu insiste en que estamos ante una cuestión de justicia. “Lo primero que supone esta vacuna es, como todas las vacunas, es un acto de justicia social porque las vacunas protegen a los pobres, a los más desfavorecidos”, ha explicado.
“En esta época de buenísimo político y de hacerlo todo por el bien de los demás, nos olvidamos de que la vida es el bien más preciado. Si tenemos una vacuna que aumenta la esperanza de las personas, se debe hacer un esfuerzo y dejarse de otras zarandajas”, ha aseverado.
Apunta en este sentido las consecuencias que puede acarrear esta infección respiratoria en las personas de más edad. “Aumento de probabilidades de tener un infarto miocardio, se multiplica por tres, incluso de tener un ictus.” Insiste en que estamos ante una infección “típica de la vejez que ahora se empieza a conocer mejor”.