Policía Nacional desarticula un grupo criminal especializado en hurtos en cajeros

La Policía Nacional ha detenido en Murcia a cuatro personas de nacionalidad rumana --dos hombres y dos mujeres con edades comprendidas entre los 19 y los 25 años-- como presuntos autores de varios hurtos y pertenencia a grupo criminal.

Un agente que se encontraba fuera de servicio detectó la presencia de dos hombres y dos mujeres junto a una entidad bancaria, que, por su forma de actuar, le hizo sospechar de que pudiese tratarse de un grupo organizado dedicado a la comisión de hurtos.

Inmediatamente dio aviso al Grupo de Policía Judicial especializado en este tipo de delitos, estableciéndose un dispositivo de vigilancia que permitió comprobar cómo las mujeres señalaban a un octogenario y los varones se dirigían hacia él, colocándose uno a su lado y el otro detrás, tratando de abrazarlo.

Al ver a la Policía, los presuntos ladrones iniciaron la huida en un vehículo, que finalmente resultó interceptado.

En el cacheo realizado a los detenidos, así como en el registro practicado en el vehículo que utilizaban, los agentes lograron intervenir 810 euros, joyas y dos cortauñas que usaban para cortar las joyas de sus víctimas. Por gestiones practicadas, los investigadores pudieron acreditar la participación de estas personas en otros hechos delictivos perpetrados en Murcia, Almería y Granada.

Este grupo de personas había cometido unos días antes un hurto en Almería. La víctima, una mujer de 53 años, se encontraba operando en un cajero automático cuando la abordaron diciéndole que el cajero le había tragado la tarjeta, logrando distraerla y confundirla para realizar un reintegro de 600 euros y llevarse el dinero. Ese mismo 'modus operandi' fue el que utilizaron para sustraer 900 euros a un hombre en Almería y 600 a otro en Granada.

Además, se les imputa la comisión de un 'hurto cariñoso' en Murcia. Esta modalidad consiste en que el ladrón se acerca a la víctima con un carácter sexual o petición de ayuda. En esa ocasión lograron hacerse con un reloj de la marca Rolex valorado en 7.000 euros.

Este tipo de delincuentes actúa en pequeños grupos que se organizan de forma estable y con carácter itinerante, repartiéndose las tareas con arreglo a sus habilidades.